Categoría: Conservas Dificultad: Fácil
Nunca hice jalea de ningún tipo y ya van 2 años que me regalan muchos membrillos, así que me puse manos a la obra sin saber que iba a salir y sí me ha gustado el sabor y la consistencia obtenida.
Esta jalea se toma bien para desayunos y también con carnes rojas le da un toque y sobre todo en mi plato ya que así lo disimulo o quito ese sabor de carne roja que no me gusta nada.
Ingredientes:
- 2 kilos de membrillos bien limpios frotando con un cepillo y bajo el grifo con su piel y corazón ya que son estos los que contienen la pectina
- 1, ½ de agua
- Una rama de vainilla
- Azúcar suficiente
Instrucciones:
- Trocear los membrillos en 4, cubrir con el agua y dejamos hervir unos 30 minutos hasta que estén tiernos. Dejar enfriar un poco.
- Pasar el caldo obtenido por un tamiz para quitar impurezas a una olla. Añadir por cada litro de líquido 750 g de azúcar y la vainilla en rama. Dejar hervir a fuego suave quitando la espuma que se forma de vez en cuando. Dejar así hasta que el líquido se va poniendo gelatinoso, unos 30-40 minutos.
- Hay quien la pasa por una gasa estéril antes de cocer, yo no lo he hecho.
- Envasar en frascos bien limpios e incorporar la jalea caliente, cubrir con papel film y tapar con la tapa correspondiente, la consistencia de la jalea fría debe ser gelatinosa
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